Este año de 2013 se cumplen 50 años de una composición musical muy importante en la Semana Santa de Cabra. En 1963, el añorado Maestro don José Rodríguez López dio a nuestra Semana Mayor la que sería su primera Marcha procesional, aun cuando no fuera dedicada a una imagen egabrense, sino a una de la vecina localidad de Lucena. La imagen es la del grupo escultórico de María Santísima de las Angustias, procedente de la extinta Cofradía de la Veracruz y Paz, una Piedad conocida popularmente como “Virgen de Piedra”. Esta imagen recorrió las calles lucentinas en solemne procesión general en julio de 1800. En 1802 los albaceas del II Marqués de Montemorana dispusieron la construcción de un altar para su ubicación en la ermita de la paz, sede la Cofradía. En 1826 fue trasladada al oratorio de doña Juana del Pino en su domicilio de la calle Ballesteros. Posteriormente, en 1927, se crearía en torno a este grupo escultórico una cofradía en San Mateo, que no duró mucho tiempo, ya que de nuevo volvió a la Cofradía de la Paz. Desde entonces, su último Cuadrillero Antonio Villa Reyes, así como sus herederos, han venido sacando la procesión de la Virgen de Piedra desde su domicilio, hasta el año 1982 en que fue trasladada por la familia Villa Álvarez de Sotomayor, a la iglesia de la Madre de Dios donde permanece en la actualidad y desde donde es procesionada cerrando el Jueves Santo agregada a la Cofradía Franciscana de Pasión. Es precisamente en casa de don Antonio Villa, compositor y Director de la Coral Lucentina, donde su muy amigo el Maestro Rodríguez ve esta piadosa imagen en la que se inspira para la creación de su Marcha Fúnebre “VIRGEN DE PIEDRA”.
Esta marcha forma parte desde su creación del repertorio que nuestra Banda de Música local interpreta durante la Semana Santa pero además también es interpretada desde hace muchos años por las Bandas de Música de las localidades vecinas de Lucena, Rute, Moriles, etc.
Como antes mencioné se trata de una marcha fúnebre, de lenta, suave y melancólica introducción de la madera tras la cual, unas pronunciadas escalas ascendentes con destacada presencia del metal proponen de nuevo la introducción pero con matiz fuerte en esta ocasión y con un sinuoso contrapunto. Tras esto la trompetería y los bajos discursan sobre un acompañamiento rítmico tradicional del que se encargan los clarinetes, las flautas y los saxofones. Finaliza la marcha con un característico trío de melodiosa factura que devuelve la calma inicial como haciendo caminar el paso de la piadosa imagen que inspira las notas sobre el pentagrama.
Este año de 2013 se cumplen 50 años de una composición musical muy importante en la Semana Santa de Cabra. En 1963, el añorado Maestro don José Rodríguez López dio a nuestra Semana Mayor la que sería su primera Marcha procesional, aun cuando no fuera dedicada a una imagen egabrense, sino a una de la vecina localidad de Lucena. La imagen es la del grupo escultórico de María Santísima de las Angustias, procedente de la extinta Cofradía de la Veracruz y Paz, una Piedad conocida popularmente como “Virgen de Piedra”. Esta imagen recorrió las calles lucentinas en solemne procesión general en julio de 1800. En 1802 los albaceas del II Marqués de Montemorana dispusieron la construcción de un altar para su ubicación en la ermita de la paz, sede la Cofradía. En 1826 fue trasladada al oratorio de doña Juana del Pino en su domicilio de la calle Ballesteros. Posteriormente, en 1927, se crearía en torno a este grupo escultórico una cofradía en San Mateo, que no duró mucho tiempo, ya que de nuevo volvió a la Cofradía de la Paz. Desde entonces, su último Cuadrillero Antonio Villa Reyes, así como sus herederos, han venido sacando la procesión de la Virgen de Piedra desde su domicilio, hasta el año 1982 en que fue trasladada por la familia Villa Álvarez de Sotomayor, a la iglesia de la Madre de Dios donde permanece en la actualidad y desde donde es procesionada cerrando el Jueves Santo agregada a la Cofradía Franciscana de Pasión. Es precisamente en casa de don Antonio Villa, compositor y Director de la Coral Lucentina, donde su muy amigo el Maestro Rodríguez ve esta piadosa imagen en la que se inspira para la creación de su Marcha Fúnebre “VIRGEN DE PIEDRA”.
Esta marcha forma parte desde su creación del repertorio que nuestra Banda de Música local interpreta durante la Semana Santa pero además también es interpretada desde hace muchos años por las Bandas de Música de las localidades vecinas de Lucena, Rute, Moriles, etc.
Como antes mencioné se trata de una marcha fúnebre, de lenta, suave y melancólica introducción de la madera tras la cual, unas pronunciadas escalas ascendentes con destacada presencia del metal proponen de nuevo la introducción pero con matiz fuerte en esta ocasión y con un sinuoso contrapunto. Tras esto la trompetería y los bajos discursan sobre un acompañamiento rítmico tradicional del que se encargan los clarinetes, las flautas y los saxofones. Finaliza la marcha con un característico trío de melodiosa factura que devuelve la calma inicial como haciendo caminar el paso de la piadosa imagen que inspira las notas sobre el pentagrama.
José Fernández Álvarez.